martes, febrero 27, 2007

El NO Arte Pop de Eero Aarnio
.
.
El Pop-Art, Arte Pop nace en la década de los cincuenta; siendo el precursor de tal corriente artística, el pintor inglés Richard Hamilton. En su primera intención, el arte popular proyectaba masificar las expresiones artísticas removiendo de ellas la concepción de objetos únicos, trastocando la tendencia de los trabajos como elementos para producirse en serie y alcanzar la posición de unidades de consumo cotidiano.

En su desarrollo, dicha corriente fue retomada por el americano Andy Warhol, quien en los sesenta se enfiló como el mayor exponente del Pop-Art a raíz de sus trabajos pictóricos.

Actualmente el Museo Franz Mayer de la Ciudad de México, presenta una colección denominada: Fantasías del Pop. El diseño de Eero Aarnio. Tal compilación reúne una serie de creaciones de Aarnio, diseñador finlandés. Mesas, lámparas y sillas que bajo la percepción de Eeron rebasan su condición básica para transformarse en algo más allá; jugando con la ergonomía, la estética y el estilo. Propuesta decorativa que gracias a su dinamismo extiende las funciones primarias y alcanzó el reconocimiento de “estilo de vida” a finales de los sesenta, teniendo como base la silla Ball. Un asiento a manera de esfera con cualidades de ergonomía, comodidad y armonía estética; que sin duda tras los años se ha afianzado como un icono cultural.

Aunque el trabajo y progreso de propuestas ha hecho que los proyectos de Eero se alejen del diseño industrial simple y utilitario para ordenarse más hacia los territorios del arte, parece demasiado arriesgado definir sus creaciones como elementos o tendencias del arte pop. Ya que si bien los objetos del finlandés aluden a colores estridentes y materiales propios de la corriente pop, su historia dentro del consumo los encamina generalmente hacia un mercado selectivo, alejado de la decadencia del capital con los estragos que esto conlleva al que sugiere la base del Pop.

Sin duda, digna de todo reconocimiento la oferta de Aarnio, erróneamente denominada Arte Pop. A veces no basta la incorporación de tonalidades para entrar dentro de una corriente. Tan arbitrario cálculo podría ser igual de peligroso como seleccionar el bolso Louis Vuitton con las canvas más llamativas y por tal distinguirlo como elemento clave del Pop-Art.
.
Por Carlos Alberto Ruiz

viernes, febrero 16, 2007

Camera Obscura

.


Algunos días atrás, Camera Obscura realizó su primer concierto en la Ciudad de México. Esta banda escocesa apostó por un espectáculo en el que ofreció gran parte de su último material de nombre Let`s get out of this country.

Es curioso, tal propuesta se encuentra en proceso de posicionamiento dentro del público nacional, de sobra sabemos, jamás alcanzará grandes multitudes. Sin embargo, sus expectativas seguro fueron rebasadas al mirar ante ellos a un público nutrido que los esperaba y vitoreaba cada una de sus interpretaciones. Mas la personalidad y actitud tan “escocesa” de los integrantes no dio para mayores emotividades.

Al final nos llevamos la sensación de haber presenciado un recital de calidad en todo sentido; en un ambiente de contacto con las pocas emociones que se permitieron los músicos. En general una buena velada, salvo por el grupo abridor, Chikita Violenta, algo así como los Magneto pero con instrumentos.

El evento tuvo lugar en el Polyforum Cultural Siqueiros, lo cual requiere mención aparte. El marco del mural del pintor mexicano puede engrandecer cualquier espectáculo. Es impresionante mirar tras los ojos de la música la sociedad decadente y luchadora que plasmó el artista. Esto transformó el concierto en un show multimedia enmarcado por una pantalla infinita.

Con respecto a la música de los Camera, me agrada mucho ese pop con el que juegan. Es raro, a veces parece que las agrupaciones escocesas se mantienen al margen del tiempo y de las corrientes para seguir defendiendo ese toque que únicamente puede ser capturado por los conjuntos de esa región.

Platicando con otros asistentes, fue inevitable el balance común; la analogía de la voz de Tracyanne Campbell con la de Elizabeth Fraser; las atmósferas de la guitarra de Kenny McKeeve con los viajes acústicos de Robin Guthrie. A partir de Camera Obscura pudimos estar cerca de ese otro ex-matrimonio escocés.
.
.
Por Carlos Alberto Ruiz

miércoles, febrero 14, 2007

De San Valentín
.
El 14 de febrero y su condición de fecha de festejo al amor es una situación que molesta a muchos. Lo irónico, les molesta a tal grado que llegan a darle tal importancia cuando en su opinión no tiene sentido. En mi caso no recuerdo haberlo celebrado como tal, mas no me hastía; considero que cada quien tiene el derecho de gastar su dinero y sus afectos como y cuando quiera. Si bien los artículos y programas de motivación nos sugieren que debemos amar a diario y no reservarlo para un solo día, creo que también ésta es una visión extrema; tan extrema como imaginar a alguien cocinando a diario pavo para recordar la noche buena.

Claro, el amor debe ser una constante, pero también recordemos que incluso en el amor existen los espacios de individualidad y soledad donde el otro no cabe. Es así que socialmente se toma un tiempo y lugar determinado para exponer y distinguir al amor a través del consumo; eso a muchos como les puede, pero ¿qué no es consumo en nuestro tiempo?

El asunto es que precisamente hoy, San Valentín, tuve que ir inevitablemente a una plaza comercial a realizar un pago. Me aterraba asistir en este día, sin embargo, me aterraba más el tener que pagar intereses por mi paranoia, así que literalmente: “hice de tripas corazón”.

Llegué al lugar, los almacenes envueltos en globos, docenas de adolescentes tomados de la mano; en pareja, en grupo, haciendo una celebración que de verdad se antojaba; que me hizo anhelar estar sentado con mis amigos en una mesa de McDonald’s. Pero bueno, mi entusiasmo no dio para tanto y tuve que buscar refugio y alimento por otros lados. Pese a lo congestionado del asunto corrí con suerte al recibir mesa de inmediato. Quedé sentado de tal manera que podía mirar un gabinete que compartía una pareja, la cual estaba uno frente al otro, ofreciéndose miradas de múltiples lecturas. Minutos después, el chico había saltado a tomar lugar al lado de la joven ¿quién puede encabronarse al ver eso? El egoísmo existe.

Y la anécdota del día: en un momento de la comida –que hacia solo y leyendo- el grupo de meseros rodeó mi mesa y empezó a cantar las mañanitas de lo más sabrosón; de repente, uno de ellos cayó en la cuenta de que el festejado se encontraba en la mesa de a lado, inmediatamente todos me dieron la espalda abandonándome en el pensamiento de lo patético que debe ser cumplir años el 14 de febrero y comer con tu alma…

Por cierto, no me gusta que me canten las mañanitas.
.
.
Por Carlos Alberto Ruiz

martes, febrero 06, 2007

Xipe Totec
.

Xipe Totec, cuya traducción al castellano significa nuestro despellejado señor, es el nombre de uno de los dioses de la cultura azteca. De acuerdo con la mitología prehispánica, esta deidad se retiró la piel para poder alimentar con ella a la humanidad. Los sacrificios para adorar a Xipe Totec consistían en desollar a los esclavos para poder así ofrecerle su dermis a este Dios de la fertilidad.

A partir de ello, el artista plástico Héctor Velásquez, realiza un trabajo formado por un conjunto de esculturas que evocan modelos de caras, manos, bocas y piernas humanas, que cubiertos con una fina capa de hilo crean una textura que dan la apariencia de cuerpos despojados de toda piel y muestran músculos al intemperie. Tales objetos constituyen una colección que se anuncia bajo el nombre del Dios azteca, Xipe Totec. Y con ella Velásquez crea metáforas de la piel humana como órgano capaz de regenerar la conciencia y emociones del hombre.

Mirar el trabajo escultórico de este artista, empuja hacia el miedo, el pánico que provoca la sangre, y cuya analogía del desollado nos lleva hacia el cuestionamiento de qué hay con nuestra sociedad actual, qué tan brutales son los sacrificios de nuestro tiempo y si alguna vez podremos llegar a cambiar de piel para transformarnos hacia una nueva humanidad.

Las expresiones y posiciones que adoptan los elementos de esta muestra invitan hacia diversas lecturas, sin embargo, algo hay, que en ellas prevalece la angustia y la reflexión que hace recordar lo alentadora que puede ser la expresión artística.

Xipe Totec, y otras colecciones de Héctor Velásquez, permanecerán expuestas hasta el mes de marzo en Terreno Baldío Arte en la Ciudad de México.
.
Por Carlos Alberto Ruiz