sábado, septiembre 01, 2007

De transformación y relaciones humanas

Desde hace un par de años he llegado a realizar algunos textos y pequeños trabajos en torno a las relaciones de pareja, entendiendo a éstas como fundamento de un estilo de vida entre dos individuos que integran y comparten sus emociones, sensualidad, intelectualidad, corporalidad y deseo.

Mi aproximación hacia esta temática tiene como fundamento dos ensayos: El Arte de Amar de Erich Fromm y La Llama Doble de Octavio Paz; sin embargo, hace algunos días recibí como regalo un trabajo de la autoría de Rainer Maria Rilke, que bajo el título de Cartas a un Joven Poeta, me ha compartido nuevos elementos para integrar a mi todavía estrecha visión al respecto.

Este conjunto de epístolas fechadas en su mayoría en el año de 1904, surgen en un momento en el que el género femenino sobrevivía a condiciones desfavorables y de separación, siendo éste el marco bajo el cual Rilke visiona las tragedias de la desigualdad, mas su percepción ambiciosa le permite vaticinar: “[…] un día existirá la muchacha y la mujer cuyo nombre no signifique meramente una opción a lo masculino, sino algo por sí, algo que no se piense como un completamiento y un límite, sino sólo vida y existencia: la persona femenina.”

Bajo esta percepción que vislumbra ya una identidad de la naturaleza femenina, resulta inevitable cuestionar cómo el actual rol de la mujer ha devenido en una transformación en el concepto de relación de pareja e incluso en la noción misma del amor en el mundo occidental, de forma más penetrante en las grandes urbes.

Si el amor se asienta en la capacidad de dejarse ir con el otro, es también recibir del otro. Por tal, la experiencia de las emociones se enriquece en cuanto más elementos se tengan para compartir, claro, esto no refiere exclusivamente a los aspectos físicos, el propósito es más profundo.

El escenario de la sociedad actual integra a mujeres con grandes conocimientos, expectativas y experiencias, hecho que ha devenido en la transformación estructural de la pareja moderna, arribando a una consecuencia también anunciada por Rilke: “Este progreso transformará la experiencia del amor […] convirtiéndola en una relación que se entienda de persona a persona, no ya de hombre a mujer.”

Sin duda, la cita anterior funciona para advertir la evolución constante de las relaciones, del mismo modo que invita a la reflexión y hacia un cuestionamiento que pese al tiempo no encuentra certezas, sino por lo contrario aumenta sus dudas.
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Por Carlos Alberto Ruiz

7 comentarios:

Dorix dijo...

A propósito de amor y dudas y certezas, me acordé de una frase: "si el amor es la respuesta, ¿me podrías repetir la pregunta?"

Anónimo dijo...

Tal vez pueda existir una relaciòn en tèrminos de equidad, es decir en donde el hecho de ser mujer o ser hombre no juegue en principio ni a favor ni en contra. Sin embargo hay sensibilidades y modos de entender la realidad que ya sea por cultura o por natura imponen diferentes formas de reaccionar y de hacer en la vida. Lo ideal es que esto no funcione como prejuicio y sì como enriquecimiento, no?

FABIANA

Anónimo dijo...

Te Felicito, es mi primer comentario en el Bloog, de verdad te lo digo, me impresiona ver como creces profecionalmente día con día, me siento orgulloso de ser tu hermano, Tienes una gran visión de la vida.
Un Fuerte Abrazo. TE QUIERO UN CHINGO CARNAL.

Anónimo dijo...

Pienso que el autor en este sentido sólo hace un análisis de cómo tenía que evolucionar la mujer para que su situación pudiera cambiar pero el autor no menciona que los hombres también deberían evolucionar y dejar de pensar que la mujer es sólo una opción a lo masculino. Desgraciadamente viviendo en el 2007 sigue habiendo mucha desigualdad, enfocándonos sólamente en el marco del amor y las relaciones humanas y alguien podría decir que eso es solo gracias a la poca evolución de esas mujeres?
Marlene

Anónimo dijo...

Es un tema difícil de abordar pero lo que más me inquieta es que TÚ hables acerca de. Pienso luego existo... es verdad? Supongo y luego pruebo, hasta cuando cesará esta competencia?

La lucha por la individualidad la lleva a cabo cada ser humano es así? Tanto hombres como mujeres hemos tenido la misma oportunidad de participación... las relaciones de pareja suponen en cierta medida la percepción de lo imperceptible...

Anónimo dijo...

Las relaciones de pareja son demasiado complejas y en todas el rol de la mujer es muy diferentes, el cual, depende directamente de la mujer en sí, ella pone los lugares que cada uno va ha ocupar y sabe manejar las situaciones a su favor – no en todos los casos.
Las mujeres actuales son muy demandantes y los hombres muy relajados.

El amor actual es relacionado con el grado de satisfacción sexual y no se contempla una fase más elevada, como compartir compromisos, tareas, apreciar los gustos del otro, impulsar a la pareja a superar sus expectativas de vida, involucrarse en un bien común y aprender a resolver los conflictos, los desacuerdos y los malos ratos, que en cualquier relación son la sal y pimienta de cada día.

La vida en pareja no es nada fácil, cada unos tienen sus propios miedos, mitos y costumbres, tan diferentes como el agua y aceite, es por esto, que es tan rico tener a nuestro lado a una persona totalmente diferente, se deben de hacer nuevos mitos, miedos y costumbre de la pareja.

A mi percepción las mujeres deberíamos de ser más flexibles, amorosas y humanas – ya que algunas de nosotras lo hemos olvidado- los hombres juegan un papel primordial, debido a que en varias ocasiones ellos son los primeros en romper las reglas que ambos establecieron en la relación.

Las mujeres y los hombres debemos de aprender a convivir y no competir como se acostumbra en la actualidad, el que uno u otro tenga un mejor trabajo ó desempeñe funciones diferentes, no nos hace más ó menos en la relación, se debería de entender que es para un beneficio de la pareja no de un individuo.

ATTE
SUSANNA

Anónimo dijo...

LA MUJER ERA LA PEREJA IDEAL HASTA QUE SE LE HIZO DAÑO, SE LEVANTO Y COMETIO UN ERROR QUERER SER COMO UN HOMBRE, DONDE QUEDASTE MUJER ABNEGADA, RECATADA Y CARIÑOSA, PORQUE YA NO TE ACUERDAS DEL CALOR DE UNA FAMILIA, SOLO BUSCAS EL CRECIMIENTO, DONDE QUEDARON LOS ELEMENTOS DE UN HOGAR, AHORA POCAS CONOCEN EL AMOR, SOLO LA CONVENIENCIA, VALORATE A DIFERENCIA DE NOSOTRAS UN HOMBRE NUNCA NOS PODRA SUSTITUIR