lunes, octubre 02, 2006

Hard Candy
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Niña Mala (Hard Candy), se nos revela como una película cruda, que sí con muchos elementos de irreal, pero no por ello menos cruda. Cómo momento climático de la cinta nos encontramos la escena de una castración casera. Por supuesto durante el preámbulo y desarrollo de tal ejecución quirúrgica muchos de los ahí presentes, y por supuesto yo mismo, no dejamos de retorcernos al interior de nuestra butaca.

El noventa por ciento de la historia se cuenta al interior de una casa y en este sentido la fotografía se resuelve de muy buena manera y eso hace que la película fluya de forma muy rápida. Personalmente me parece buena, aunque no podría ver una película similar hasta dentro de unos meses.
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Por Carlos Alberto Ruiz

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